Por
Daniel Vico.
La
elección entre distintas cajas puede ser difícil aunque se conozca su
contenido. Y todavía más difícil si es para hacerle un regalo a alguien. “Una
persona puede comprarle una experiencia a otra, en los sectores de gastronomía,
bienestar, aventura y estadías”. Así explica el éxito de su emprendimiento
Lucas Werthein de 30 años, uno de los fundadores de Big Box, una pequeña
empresa que se lanzó al mercado en noviembre del 2009 con una inversión inicial
de $80.000.
De
acuerdo a las categorías que ofrece la empresa, los clientes pueden elegir
entre numerosas cajas para agasajar a diferentes personas con una vivencia
particular. Como por ejemplo, un vuelo en planeador, un paseo en velero, un día
en un spa, degustación de chocolates, o bien, un fin de semana en un hotel de
lujo de Pinamar.
“Empezamos
con ocho productos y hoy son 17 de cuatro categorías: bienestar, gastronomía,
aventura y estadías”, asegura Gastón Parisier de 27 años, que junto a Agustín
Gold y Lucas Werthein completan el trío fundador de Big Box. “Volvía de un
viaje por Europa junto con Agustín y al poco tiempo fundamos la empresa. Es un
modelo que se desarrolló en Bélgica y en Francia”, agrega Parisier, quien
estudio ingeniería industrial en el ITBA y también es mago.
Lo
particular de este sistema es que el 50% de las ventas se producen entre
noviembre y diciembre. “La temporada empieza en octubre, con el día de la
secretaria, día de la madre, y en noviembre y diciembre con los regalos
corporativos”, afirma Agustín Gold, que tiene 26 años.
A
pesar de que el 75% de las ventas son al mercado corporativo, “la apuesta de
este año de Big Box fue a los consumidores finales y al retail”, según Agustín
Gold. El restante 25% de las ventas pertenecen a auto regalos. Entre sus clientes, Big Box trabaja con
Etiqueta Negra, con Galerías Pacífico y con Paseo Alcorta.
Big
Box en 2009 vendió 2.000 cajas. En 2010, 20.000 y en 2011 40.000. Para este año
proyecta llegar a vender 90.000 cajas. “Proyectamos facturar $18 millones, por
encima de los $9 millones de 2011” ,
afirma Agustín Gold.
Para
Lucas Werthein, la estrategia es “posicionar a la marca como la mejor marca de
experiencia de calidad en Argentina y en el mundo”. Según Werthein, que estudió
Ciencias Políticas en la UBA ,
el diferencial de Big Box con otras empresas similares “es el cruce de
experiencias que compartimos, tenemos 400 actividades solo seis compartidas con
la competencia”.
Big
Box, que cuenta con 25 empleados, tiene dos puntos de venta propios
distribuidos en la Ciudad
de Buenos Aires. “El plan para el próximo año es tener cinco puntos de ventas
propios y 40 en consignación”, asegura Gold, economista de la UBA.
Con
respecto a extender la marca, Gold asegura: “Planificamos operaciones en
Uruguay. En Brasil la empresa más grande tiene nuestro tamaño, pero el mercado
es diez veces más grande. Pensamos que sería bueno una pata local, por el
idioma y el tipo de mercado, y estamos en ese camino”. Las experiencias ahora
se venden en cajas, Big Box lo demuestra.
Precios de Big Box
La
caja más barata en el rubro gastronomía es de $220 y es para una sola persona.
La más cara sale $720 y es para dos personas.
En
el sector aventura, se pueden elegir entre tres cajas, todas para una o dos
personas. La más barata sale $310, la caja intermedia $540 y la más cara $1100.
El
rubro bienestar está compuesto por cuatro cajas. De $310, $320 (ambas para una
persona), de $560 (para una o dos personas) y de $690 (para una persona).
Por
último, el sector de estadías está integrado por cuatro cajas, todas para dos
personas. De $700, $1100, $1900 y $2800.